Ayer 7 de la noche, Hoy 4 de la tarde.
Las batallas diarias. Pero no estas sola, a pesar qe los dolores son terribles y las dudas en momentos agobian el corazon.
No te dejaremos solos, porque nuestro deber del corazón y del Alma nos motiva a estar al pie de las batallas.
No sería justo que por la calma anhelada bajemos los brazos y calmemos nuestra angustia, mientras TU sigues en el combate.
La traición no tiene cabida en este instante. Sólo el ánimo dispuesto para los combates.
Podrán ser dos combates, diez, veinte, cientos, miles...si Ella los pelea, nosotros siempre estaremos a su lado. Y cuando flaques te socorreremos, seremos tus brazos, tus piernas, tus voces.
Nuestra vitalidad es tuya por derecho y por razón. Y nuestra sangre gustosa reemplazará nuestras lágrimas en estos instantes.
Jamás lo dudes y siempre nos sentirás a tu lado, siempre y eternamente.
Te quiero mucho
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